Una extraña normalidad

Manuel Rodríguez
Todo parece normal. Día a día la calle olvida la angustia característica de semanas de lucha y se acerca más a un contexto político normal en donde se debate quienes serán los candidatos a unas *elecciones".

Parece que todos hemos perdido el foco. A pesar de que aún se busca el cambio este parece cada vez más lejano y da hasta la sensación de ser innecesario, ya que lo importante de hoy es ganar las elecciones de octubre.

Me atemoriza pensar en el futuro del país con esta sociedad, una sociedad totalmente sumisa ante los poderes políticos que la dominan. Esperan que otros le digan que hacer, incluso cuando esté cada vez más cerca del precipicio generalizado.

Hay una extraña calma. Se habla de fútbol, de Game Of Thrones y de misses. Me da miedo pensar que esto se deba a una aceptación generalizada de la población con respecto a su actualidad y su futuro. Aceptar un Gobierno que ha arrebatado todo resquicio de prosperidad en el país.

No sé que puede pasar, lo que sé es que la calle se siente completamente distinta a como estaba hace dos meses y eso preocupa.